Viejos términos, nuevos significados: Registro Sensorial Ampliado

Résumé

Dentro de las palabras que resultan clave en nuestras prácticas disciplinares y nuestras producciones en investigación, surgen dos que están íntimamente ligadas al reconocimiento y análisis del espacio en las dimensiones territorial, urbana y arquitectónica. Palabras que han ampliado el alcance del propio término en el campo de la Arquitectura y el Urbanismo. Hablamos del concepto de registro, ligado a una concepción más amplia de lo que entendemos como percepción, en relación a las posibilidades de captación y análisis espacial en términos de hábitat y paisaje.

Lo que hasta hace no mucho tiempo se limitaba a un acercamiento primordialmente visual al espacio real para indagar aspectos fenomenológicos, nos enfrenta hoy a un nuevo enfoque que rescata aspectos novedosos que lo componen, merced a las posibilidades tecnológicas actuales y a la evolución que consecuentemente, ha manifestado la teoría específica acerca del abordaje del espacio habitable o paisaje, involucrando los aspectos culturales de la visualidad.

En consecuencia, la palabra percepción, dentro del marco específico de nuestra práctica, implica la atención a un conjunto de estímulos sensoriales (visuales, auditivos, táctiles, olfativos, cinéticos) que, combinados, superan como recurso, instrumento o punto de partida de nuestro trabajo de investigación del lugar, lo meramente visual. La palabra percepción adquiere hoy para nosotros, un sentido más amplio del que la disciplina, tradicionalmente, le había asignado.

Al mismo tiempo, el término registro hace alusión a la actividad de relevar y dar cuenta desde la representación, de aquellos estímulos sensibles atravesados por el conocimiento subjetivo del autor, que definen y el carácter y la identidad de un sitio o lugar. No solamente lo que se ve, sino también lo que se escucha, se toca y se siente, evocan y construyen sentidos y significados espaciales. Nuestro trabajo de investigación aborda esta temática a partir de considerar los alcances de un registro sensorial ampliado (RSA), cuyo objetivo es el de rescatar toda la información que ofrece un determinado espacio urbano-arquitectónico, apelando tanto a los recursos tradicionales de representación como a los que ofrece actualmente la tecnología. Desde el empleo de dispositivos y medios digitales hasta la utilización de programas, plataformas y entornos de internet.

Hablar hoy de registro y percepción nos obliga a actualizarlos como palabras que resignifican procedimientos ligados a la práctica y la metodología, en un proceso de enseñanza – aprendizaje, en el contexto de la formación del arquitecto, tendientes a ampliar la experiencia de conocer y analizar su objeto de estudio: la arquitectura y la ciudad.