Juguetes con lupa y filtro de género hacia una sociedad más diversa, inclusiva y local

Abstract

Tanto el juego, en cuanto a práctica inherente y vital de la infancia, como los juguetes poseen un incuestionable protagonismo en la formación de las personas y están vinculados a la historia de la humanidad como reflejo de las sociedades y de la cultura de cada época en particular. El mundo de los juguetes ha tenido relevancia en el ámbito de la educación formal de la pedagogía y psicología moderna, sin embargo, no ha ocupado una enorme atención como objeto de estudio teórico y análisis social en el diseño industrial, probablemente por el sentido común que se les atribuye. El mundo del juego, como práctica social y cultural, constituye un objeto de estudio de gran potencial desde múltiples perspectivas y disciplinas; nos permite reflexionar sobre las formas de entretenimiento, ocio y participación de la sociedad que lo practica y, a su vez, hace posible la indagación sobre nuevas problemáticas que se presentan.

Este artículo pretende analizar cómo impacta el uso de los objetos de la cultura lúdica en la construcción del modelo de infancia y en las prácticas sociales futuras. Propone hacer una reflexión acerca de los juguetes y la importancia que éstos tienen al ser portadores de sentido y contenido simbólico. Cómo y porqué estos dispositivos, que pensados como soporte funcional o propositivo a la acción de jugar, suelen ser considerados hitos de la infancia e instrumentos de formación de personas, sociedad y cultura.

Se propone entonces observar qué pasa en relación a nuestro contexto social y los grandes cambios estructurales que atraviesa nuestra sociedad en relación a la inclusión, pluralidad y diversidad de género. Este acercamiento permitirá, también, examinar las tipologías y modelos de juegos y juguetes para comprobar si aún hoy, operan como reproductores y moldeadores de roles y estereotipos de género. Para lo cual se analizará qué sucede en el campo de la producción local, tanto de la industria del juguete como de sectores de pequeñas y medianas empresas (PYMEs), en cuanto a la producción simbólica y de contenidos de algunos casos, con el fin de dar a conocer el rol que ocupa el diseño como disciplina que otorga valor en la capacidad de construir nuevos vehículos para transformar y acompañar la realidad de todas las infancias.